Hoy os he preparado esta deliciosa «crema de calabaza y puerros».
Hacía tiempo que en casa me la pedían pero en cuanto entraba calabaza en casa la utilizaba para hacer algún pastel y me quedaba sin producto para la crema.
Creo que ya ha llegado el momento de ponernos en forma y de cuidarnos a la vez que nos damos un homenaje con este plato tan rico. Esta crema es deliciosa y muy sencilla de preparar sobretodo si compras la calabaza envasada al vacío, ya cocida y troceada, como hago yo.
La calabaza es una hortaliza muy versátil que puede ser utilizada en múltiples recetas. En crema resulta excelente. Además, en este caso, la puedes tomar calentita o como una crema fría. No se puede pedir más, ¿verdad?.
Si además le añadimos los puerros le damos una suavidad increíble.
En este caso todos los ingredientes son veganos así que, los que os cuidáis hasta la saciedad, no tenéis excusa para no hacerla.
Pues nada, sólo deciros que disfrutéis de esta saludable delicia.
INGREDIENTES:
- 400 g de calabaza cocida.
- 1 patata grande (100 g).
- 2 puerros.
- 1 diente de ajo.
- 8 cucharadas de aceite de oliva.
- Caldo de verduras.
- Sal y pimienta.
- Para decorar: nata vegetal, hierbas y aceite de oliva.
ELABORACIÓN:
Troceamos la calabaza, la patata y los puerros. (los puerros hay que lavarlos muy bien).
Ponemos el aceite en una ola y, cuando esté caliente, echamos los puerros cortados. Cuando estén doraditos, añadimos la calabaza, la patata el diente de ajo. Salpimentamos y seguimos rehogando.
Cuando veamos que está todo bien pochadito le agregamos el caldo de verduras hasta cubrir todo bien (podemos sustituir el caldo de verduras por agua) y cocemos hasta que la calabaza esté bien blandita.
Trituramos con un robot de cocina o con una trituradora potente.
Servimos en cuenco o plato y decoramos con nata vegetal, hierbas al gusto y un chorrito de aceite de oliva.
Se puede tomar tanto fría como caliente.