Ésta es una receta exprés pero no por ello es menos buena. Si quieres desayunar, comer o cenar, aquí tienes una muy buena solución. Además de delicioso, este plato es muy completo ya que tiene proteínas, vegetales y cereales, es bajo en calorías y muy saciante.
Pues ya sabes, aquí tienes la mejor opción. Estoy segura que una vez que lo pruebes no va a ser la última y con ese toque mejicano del pico de gallo, se convierte en el no va más, aunque en este caso sin jalapeño.
INGREDIENTES
- 4 pechugas finas de pollo.
- Hierbas aromáticas.
- 1/4 de cebolla morada.
- 1 tomate mediano.
- 1/4 de pimiento rojo.
- Un puñadito de cilantro.
- Media lima.
- 1 aguacate.
- 100 g de queso parmesano.
- 15 ml de aceite de oliva.
- Sal, pimienta y sésamo.
- Rúcula al gusto.
- 4 rebanadas de pan de molde casero.
- 4 huevos.
ELABORACIÓN
Precalentar el horno a 200°C.
Hacer el pico de gallo cortando la cebolla en daditos, el tomate y el pimiento. Añadir el cilantro muy picado y ponerle el zumo de media lima. Reservar macerando.
Salpimentar los filetes de pollo y espolvorearles las hierbas. Darles vuelta y vuelta en una sartén pintada con un poco de aceite.
Poner en una bandeja papel sulfurizado. Colocar los filetes en la bandeja y encima de cada uno una porción de pico de gallo. Cortar en dados el aguacate y añadir. Rallar por encima un poco de parmesano. Hornear de 10 a 15 minutos a 200° C.
Tostar el pan y ponerlo en un plato. Cubrir con rúcula y poner cada filete de pollo en una tostada.
Cocer los huevos durante 7 minutos. Añadirlos cortados por la mitad.
Acabar el plato añadiendo por encima sésamo tostado y un chorrito de aceite de oliva. Y ya tenéis listo para disfrutar este pollo gratinado con pico de gallo, aguacate y huevo.